Frases célebres

viernes, 15 de julio de 2011

PARA "LA ELEGANCIA DEL ERIZO"

Siempre me gustó la belleza oculta bajo la apariencia tosca y áspera de ciertas púas… Me apasiona el hallazgo de ese “lugar” donde uno puede ser quien es, así como la idea de encontrar “el escondite ideal” donde refugiarse de tanta mediocridad, falsedad, hipocresía…

Y ahora, gracias a Paloma, Renée y el señor Kakuro Ozu, revivo muchas de las reflexiones y pensamientos que yo misma he rumiado. ¡Qué grandes personajes! De mayor, Paloma, quiero ser como tú –sí, paradójicamente, sé que tienes once años–, contagiarme de tu integridad absoluta, tu profundidad magnánima… ¿Sabes? A mí también me asusta el destino grabado en la frente, pero ¡no! Siempre podemos hacer algo para cambiar lo que somos, lo que tenemos, tú solita lo descubrirás… Nunca te arrepentirás de elegir el “camino difícil”, de mirar de frente a la vida, de romper con lo que de ti se espera… ¡Eres fantástica!


René, ¡cuánto has sufrido! Pareces contener tú solita el dolor de todas esas injusticias y diferencias que han obcecado a tantas generaciones, empeñadas en distinguirnos, por dinero, posición, edad, lugar de nacimiento… ¡Vaya con lo que te deparaba el destino! Al menos, aunque siempre ocultándote,supiste encontrar tu lugar, como te dijo Paloma, hasta que llegó quien sí supo mirarte y ver lo que existía tras tu apariencia…: ¡elegancia de la buena!

¡Oh! ¡Misterioso vecino!, ¡qué agradable tu presencia! ¡Qué bonito hogar el tuyo! Todo tan sencillo, ordenado, práctico y diáfano…, pero extremadamente confortable. ¡Me encanta lo que representas! Esa capacidad de interesarte de verdad por las personas, superando el egocentrismo que a veces nos secuestra en la dichosa pecera, la cual Paloma tanto teme y trata de evitar hasta con su drástico plan... Y como ella misma pronto descubrió, emanas “educación” y “clase”, entendiendo por estas la capacidad para hacer sentir al otro que “está ahí”. ¡Cuánto escasean tus nobles maneras!

Cuánto daría por comerme con vosotros tres uno de esos dulces que prepara Manuela…; ver una película en la sala de cine de Kakuro; charlar… y esponjarme con vuestra extenuante cultura sobre la literatura rusa, el cine japonés y el arte pictórico…

Me habéis hecho pasar unos días geniales y, sobre todo, volver a reflexionar sobre lo que nunca se debe olvidar… Infinitas gracias a vuestra creadora, intentaré leerte más, Muriel Barbery.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Me encanta conversar, saber qué piensas; si pasas por aquí y de alguna manera te llegan mis palabras, déjame un comentario y ¡charlamos!